¿Cómo te sentirías si te dijera que soy un egoísta porque quiero aprender de ti?

Te voy a contar una obsesión.

Mi obsesión por el tiempo.

Mi obsesión por encontrar la fórmula para compaginar mi trabajo habitual con mi pasión por el arte.

Y, creo que la he encontrado.

De hecho, la fórmula me la dijo un Lama tibetano hace 12 años, pero no le hice caso, ningún caso, hasta hace dos años, cuando esa frase me vino a la mente otra vez:

“Dani, tienes que aprender a hacer una sola cosa a la vez”

 

Y esto es lo que llevo aprendiendo los dos últimos años

HACER UNA SOLA COSA A LA VEZ

 

Cómo somos los humanos.

Lo cabezotas que somos y lo que nos cuesta poner en práctica las ideas más sencillas y lo complicado que lo hacemos.

Cómo nos cuesta integrar lo bueno en nuestro día a día.

Y esto es así, porque somos animales de costumbres.

Y aunque sepamos que esto nos va a traer múltiples beneficios, nuestra mente nos sabotea continuamente.

Y es por esta dificultad por lo que comparto esto contigo.

¿Porque soy muy buena persona? No.

Simplemente, es porque soy muy egoísta.

Y es fruto de este egoísmo que cada día te comparto una idea para centrarte en lo que de verdad importa.

Para aprender a hacer una sola cosa a la vez.
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